ARRIBA EL AJO PATRIOTA

• (Fuente: Propia)Hoy voy a hablar del rey indiscutible de la dieta mediterránea, producto gastronómico conocido a nivel mundial y básico en la gastronomía española : EL AJO DE CHINCHÓN.

  Pese a que Las Pedroñeras (Castilla La Mancha) es conocida como «La capital Internacional del ajo» con su famoso ajo morado presentado por la gran cooperativa San Isidro «El santo», hoy voy a hablar del Ajo de Chinchón, por ser un producto que conozco de primera mano y es fácilmente diferenciado del «Ajo común».

  El 90% del cultivo del ajo se concentra en este municipio a tan sólo 50 km de Madrid. Morata de Tajuña, Colmenar de oreja, Valdelaguna y Titulicia, estas tierras tanto de secano como de regadío perfectamente cuidadas permiten una buena cosecha de un ajo prieto, de dientes; largos, estrechos y rosáceos, grueso, regular, blanco (a diferencia del de Las Pedroñeras) y posee unas cualidades claramente superiores con respecto al aroma y al sabor en comparación con el ajo común.

  Pertenece al grupo de variedades denominadas «finas», y se debe usar en poca cantidad, ya que su sabor es fuerte y picante, y sólo haciendo un buen y simple uso del producto como fusionándolo con aceite y un buen pan de hogaza o para aderezar vinagretas para ensalada, puede tratarse de un manjar.

  No obstante el ajo es tan versátil que se adapta a cualquier combinación culinaria, desde la cocina tradicional, hasta la más moderna.

  Los productos gourmet que ofrece Chinchón son varios, pero David Sáez, el presidente de la asociación de hostelería de Chinchón, recomienda probar los platos elaborados o acompañados con ajo, ya que es un producto típico del lugar.

  Os dejo una imagen de un plato de Karlos Arguiñano, sencillo y acorde con la época otoñal en la que nos encontramos, en el que el ajo aporta esa finura y completo sabor al plato.

  

  Filete de pechuga de pollo empanado, acompañado de un guiso de níscalos, cebolleta y ajo fresco.

  Y una foto de un plato ligero de elaboración propia (una pequeña aportación)

  

  Níscalos a la plancha acompañados por ensalada de canónigos, berros y tomates cherries aliñado con aceite con ajo de Chinchón.

  Para finalizar y completar esta entrada y desde el punto de vista del marketing, voy a analizar el competidor del ajo español: El ajo negro.

  El ajo negro es actualmente un producto utilizado en la alta cocina, y muy de moda entre las figuras culinarias más importantes de este país así como: Juan Mari Arzak. Se trata de un alimento originario de Japón, se someten a un proceso de fermentación natural (en determinadas condiciones de humedad y temperatura) haciendo que poco a poco el diente de ajo vaya adquiriendo tonalidades oscuras hasta convertirse en un ajo completamente negro. Pueden parecer que están carbonizados, pero su textura no es en absoluto la de un producto quemado, sino que son muy tiernos, de una textura sorprendentemente blanda y de sabor suave. Se pueden consumir directamente enteros sin ningún problema. Y están especialmente indicados para consumir a primeras horas de la mañana, ya que tienen propiedades estimulantes.

  

  (Fuente: Buenosairesmarket.com)

  Os espero en mi próxima crítica a un restaurante en el que precisamente pude degustar el ajo negro. ¿Se merecerá un «QUIERO REPETIR»? ¡NO OS LO PERDÁIS!